La cocina es uno de los lugares donde la seguridad alimentaria juega un papel crucial.
Aquí compartimos algunos consejos prácticos para mantener un ambiente seguro:
- Limpieza constante: Asegúrate de que todas las superficies y utensilios estén limpios y desinfectados. Esto ayuda a evitar la acumulación de bacterias y contaminación.
- Control de desechos: Mantén un manejo adecuado de los desechos y los residuos alimentarios. Un sistema de eliminación eficiente es clave para prevenir plagas y otros riesgos.
- Proceso de cocción: Cocina los alimentos a las temperaturas necesarias para eliminar patógenos. Esto es esencial para la seguridad de los platillos servidos.
Incorporar protocolos de seguridad e higiene en la cocina no solo protege a los empleados y consumidores, sino que también asegura la calidad de lo que se sirve.