introducir-alimentos-alergenicos-en-los-ninos-puede-prevenir-la-alergia-alimentaria

Especialistas en Pediatría y Alergología mantienen que introducir de forma temprana en la dieta de los niños alimentos potencialmente alergénicos, incluso antes de los seis meses, puede prevenir la alergia alimentaria, una reacción que cada año aumenta un 2 % y que en los países desarrollados padece uno de cada diez.

Así lo han puesto de manifiesto durante la celebración en Granada del 69 Congreso de la Asociación Española de Pediatría, en el que también han apuntado que gracias al diagnóstico molecular, tener alergia a un alimento no implica necesariamente una dieta estricta de evitación.

Según la doctora Laura Valdesoiro Navarrete, coordinadora del grupo de trabajo de Alergia a Alimentos de la Sociedad Española de Inmunología, Alergología y Asma Pediátricas, el diagnóstico molecular permite saber cuáles son las proteínas concretas del alimento que producen reacción.

"Y dado que algunas de estas proteínas se modifican con el calor, es probable que (el niño) pueda tolerar ese alimento en alguna forma de elaboración, como los horneados con harinas". Los dos alimentos que más frecuentemente provocan alergia en niños son la leche y el huevo, explica Valdesoiro, perteneciente a la Unidad de Alergia y Neumología Pediátricas del Hospital Universitari Parc Taulí de Sabadell.

En el caso del huevo, es importante saber si la alergia se debe a la proteína ovomucoide o a la ovoalbúmina para saber si se puede consumir el alimento en alguna forma o no.

En el primer caso seguramente no tolere el huevo en ningún caso porque esa proteína es resistente al calor, pero un niño con alergia a la ovoalbúmina puede comer huevo si está cocido o en horneados con harina, ha puesto como ejemplo.

En los frutos secos, por ejemplo, hay proteínas compartidas por todos los frutos secos y otras que son propias de uno en particular: "Saber exactamente cuál es la que produce reacción y en qué frutos está presente, hará que no se tenga que evitar el consumo de todos ellos", indica.

Sin embargo, cuando una prueba de alergia alimentaria sale positiva "es muy importante tener en cuenta que no siempre significa que se es alérgico a ese alimento", sino que hay que evaluarlo a fondo para asegurarse.

La especialista apunta la importancia de no infradiagnosticar a los niños, pero tampoco "sobrediagnosticarlos y prohibir alimentos a la ligera". Entiende que no hay que ser estrictos con las restricciones de alimentos, como ocurría hace un tiempo sino adecuar la dieta a las características del paciente. EFE

FUENTE: www.infobae.com